BOLETIN FIAP
Boletín FIAP
ALEMANIA

El vicecanciller Franz Müntefering hizo público ayer que el Gobierno de la República Federal aprobó ayer aumentar la edad de jubilación de los 65 a los 67 años a partir de 2029. "Es por el bien del crecimiento económico y por mantener su salud", justificó Müntefering, ministro de Trabajo de la gran coalición de socialdemócratas y democristianos liderada por Angela Merkel.Además,  Müntefering constató que las pensiones quedarán congeladas, al menos, hasta el año 2008.
 
Según el titular de Trabajo, el Ejecutivo rojinegro ha hecho cálculos y las cifras son este año incluso peores que las del pasado y nada halagüeñas para los meses venideros. De ahí que no se haya pensado dos veces dejar a los 20 millones de jubilados germanos (un cuarto de la población del país) con el sueldo congelado y con la esperanza de que a lo largo de 2008 el Gobierno vuelva a hacerles disfrutar de las tradiciones subidas de cada 1 de enero.
 
Las malas noticias bien conocidas de Müntefering son una consecuencia lógica de una Alemania que ha sufrido largos años una dura crisis económica, que tiene la natalidad de capa caída, que su esperanza de vida es elevadísima y que su paro sigue superando los cinco millones de parados.
 
Se calcula que para el año 2030, más de un tercio de los alemanes tendrá más de 60 años. "Y por ello hacemos estos ajustes", volvió a intentar razonar Müntefering, convencido de que el sistema de pensiones alemán está condenado a padecer ciertos vaivenes desagradables en los años venideros.
 
La preocupación en la población es de tal calibre que el número de alemanes que tenía un plan de pensiones privado ha aumentado de los 1,5 millones en el año 2002 a los 5,6 millones en 2005.
 
Y es que ni hasta la primera potencia europea puede soportar que sólo un 40% de sus ciudadanos entre 55 y 64 años esté trabajando, mientras que el resto se ha prejubilado o disfruta de múltiples y variadas ayudas que hasta ahora estaba concediendo el famoso Estado del Bienestar alemán.
 
La decisión de ir aumentando gradualmente la edad de jubilación ha sido de las más seguras y tempranas adoptadas por el Gobierno de gran coalición, que simplemente prosigue con la decisión del Ejecutivo anterior del socialdemócrata Gerhard Schröder de hacer trabajar dos años más a la población.
 
Ahora bien, si en un momento se especificó que ello se llevaría a cabo en el año 2035, el pasado mes de febrero Müntefering reconoció que se adelantaba hasta el año 2029 y ayer lo volvió a decir bien en alto.