Replanteando los Beneficios de Sobrevivencia - Social Protection Discussion Paper No. 0928 - Banco Mundial - Diciembre 2009 |
Este estudio provee un marco para el análisis de la eficiencia y equidad de los programas de beneficios para sobrevivientes. Estos programas fueron diseñados originalmente para apoyar a las familias frente al fallecimiento del proveedor principal, en una época en que las mujeres raras veces trabajaban, las tasas de fertilidad eran altas y las viudas fueron incapaces de sostenerse solas con sus hijos. Aun así, los ahorros voluntarios y el seguro fueron a menudo insuficientes debido a la miopía. Los beneficios obligatorios para sobrevivientes ayudaron a lograr la suavización del consumo para la familia durante toda la vida para prevenir la pobreza entre las viudas de la tercera edad el grupo en que se concentra la pobreza en la vejez. La pregunta es: ¿Se necesitan todavía estos programas en una época en que la mayoría de las mujeres trabajan y las tasas de fertilidad han bajado, y si es así, cómo debieran ser diseñados?
El autor argumenta que aun en un mundo de equidad perfecta entre los géneros, el coseguro familiar obligatorio podría aun justificarse porque las parejas probablemente no planean adecuadamente las economías de escala en el hogar. Esto lleva a que el costo de vida de un(a) viudo(a) sea mucho más que la mitad de lo que es para una pareja. Adicionalmente, en todos los países permanece alguna disparidad en los patrones de trabajo e ingresos entre hombres y mujeres. Aunque tales programas pueden beneficiar a ambos cónyuges, las mujeres son los mayores receptores porque sobreviven a sus esposos.
Sin embargo, tal como están diseñados en la actualidad, muchos programas de beneficios para sobrevivientes implican desincentivos al trabajo y redistribuciones perversas desde mujeres que trabajan en el mercado a aquellas que no, desde personas solteras y parejas de doble carrera hasta parejas en que solo un cónyuge genera ingresos y a veces de familias de ingresos bajos a familias de ingresos altos. Estos subsidios cruzados penalizan a las mujeres que trabajan en el mercado y por lo tanto podrían desincentivar tal trabajo, disminuir sus ingresos y aumentar sus tasas de pobreza en la vejez. La meta del seguro se puede lograr sin estos incentivos negativos y redistribuciones mediante la internalización del costo dentro de la familia en vez de traspasarlo al pozo común y permitiendo a las/los viudas/viudos mantener sus propias pensiones además de los beneficios de sobrevivencia.
El autor presenta evidencia empírica de la manera en que se estructuran los beneficios de sobrevivencia, incluyendo las reglas que incluyen los subsidios y los incentivos cruzados, en una muestra de 39 países de ingresos bajos, medios y altos. Cuatro patrones emergen:
1) Países con altas tasas de gasto en beneficios de sobrevivencia que probablemente son más altas que lo necesario para la suavización óptima del consumo y que desincentivan el trabajo de la mujer;
2) Países que han cerrado la mayoría de sus programas de sobrevivencia argumentando que las mujeres hoy en día se pueden cuidar solas ignorando las economías de escala de los hogares además de la persistente disparidad entre los ingresos de hombres y mujeres;
3) Aquellos que proveen una protección modesta para las personas de edad, sean o no sobrevivientes, a través de un beneficio universal de esta manera evitando los subsidios cruzados en base a estados civiles, pero también fallando en que no requieren suavización de consumo para las familias; y
4) Aquellos que hacen obligatorios los beneficios de sobrevivencia pero internalizan los costos dentro de la familia a través de pensiones en conjunto que no penalizan a las mujeres que trabajan.
Para ver el estudio completo, por favor descárguelo a través del siguiente link:
Solamente la versión en inglés: