Defensa de la Previsión Complementaria en la OIT

Fuente: ABRAPP
Fecha: Diciembre de 2008

Brasil - El sistema brasileño de fondos de pensión, que en Brasil indudablemente está en la mira de las políticas públicas fomentadoras, especialmente en los últimos años, cuenta con fundamentos legales y normativos que favorecen su crecimiento sustentable. Sin embargo, como ningún país es una isla, mucho menos en tiempos de globalización, la ABRAPP entiende que la defensa y el estímulo a la previsión complementaria deben ser vistos como valores permanentes que serán siempre defendidos en todos los foros internacionales en que quepa una actitud presente y firme como esta. Fue con este espíritu que el Presidente de la ABRAPP, José de Souza Mendon a, envió a la dirección de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), cuyo consejo se reunió noviembre en Ginebra, una manifestación de preocupación por los acontecimientos recientes en Argentina, donde el Gobierno aprobó la estatización de los fondos privados de pensión.

La ABRAPP siempre defendió un modelo de tres pilares, que prevalece en prácticamente todo el mundo y combina una previsión estatal básica, otra complementaria privada y una tercera formada por el ahorro de iniciativa individual. Cada nación elige, claro está, el camino que juzga ser el mejor, pero la ABRAPP percibe como fundamental preservar la libertad de opción de los trabajadores. Es igualmente esencial que las reglas se mantengan estables, visto que los sistemas construidos para durar décadas no pueden ser objeto de actos intempestivos. Se publica más abajo, en forma textual, la correspondencia enviada a la OIT:

Preocupados por los acontecimientos en Argentina, pedimos a Su Señoría que lleve al Consejo de Administración de la OIT el deseo de la Asociación Brasileña de las Entidades Cerradas de Previsión Complementaria, ABRAPP, de que la previsión privada basada en el régimen de capitalización, sea vivamente defendida en el momento en que sufre un duro ataque. Es muy importante que en los foros internacionales la estabilidad de reglas sea valorizada como un principio permanente, sin el cual queda bajo riesgo el esfuerzo de acumulación de reservas a lo largo de varias décadas.

El ejemplo argentino contradice las prácticas previsionales internacionales, que desde mediados del siglo pasado muestran la fuerza de una previsión privada solidamente apoyada en la voluntad de centenares de millones de trabajadores de conservar una renta digna en la jubilación. Un deseo que, sabemos todos, el Estado no consigue atender solo, también porque los cambios demográficos, con menos  nacimientos y expectativas de vida más largas, colocan cada vez más en riesgo los modelos en los cuales el pago de las jubilaciones viene soportado por las generaciones más jóvenes.

La previsión privada debe ser objeto de políticas públicas claramente fomentadoras, porque entendemos que esta es la mejor forma de atender a los intereses de los trabajadores .