Debido a que los sistemas de pensión han sido sustancialmente recortados desde el año 1990, los planes voluntarios de pensión deberán cubrir la diferencia, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

Los comentarios fueron hechos por la administradora principal de la OECD, Monika Queisser, en una conferencia en Estambul esta semana, que fuera organizada en conjunto con la Organización Internacional de Supervisores de Pensiones.

En su presentación de cifras - seleccionadas de la próxima edición del informe Una Mirada a las Pensiones ella también se refirió al creciente riesgo de jubilados en pobreza; un tema que debe ser mejor examinado.

En su informe bienal que se comenzó a publicar el 2005 la OCDE analiza las pensiones de trabajadores-de-jornada-completa con el objeto de establecer puntos de comparación de los diversos esquemas de pensión a través de sus estados miembros.

Un asalariado promedio tendrá una pensión, después de impuestos, equivalente aproximadamente al 69% de sus ingresos, una pequeña disminución del nivel alcanzado el año 2005.  El país europeo con la menor tasa de sustitución neta es Irlanda, con solo un 40%, seguida muy de cerca por el Reino Unido.  En Grecia y Turquía, la tasa de sustitución neta excede el 100%.  Luxemburgo, Holanda y Hungría se encuentran justo por debajo de dicha marca.

Si, en cambio, se toma en consideración la tasa de sustitución bruta, el Reino Unido muestra la mayor brecha entre los beneficios proporcionados bajo planes obligatorios y una tasa blanco global de sustitución de 60%, seguida de cerca por Irlanda en segundo lugar y Alemania en tercero.